Por fin estamos en Málaga, llegamos el 25 después de 2 meses y 12 días, decidimos por nuestra cuenta quedarnos ya contare poco a poco la experiencia, que no ha sido fácil.
Lo único bonito ha sido conocer a nuestro hijo que cada día nos sorprende lo que aprende y como nos entiende lo que le hablamos, es muy sociable y simpático, la familia se ha sorprendido que no lloro ni extraño a nadie. Vaya pillín que es.
Lo único bonito ha sido conocer a nuestro hijo que cada día nos sorprende lo que aprende y como nos entiende lo que le hablamos, es muy sociable y simpático, la familia se ha sorprendido que no lloro ni extraño a nadie. Vaya pillín que es.